Blas de Otero: un texto de "Historias fingidas y verdaderas"
Blas de Otero Manifiesto Un hombre recorre España, caminando o en tren, sale y entra en las aldeas, villas, ciudades, acodándose en el pretil de un puente, atravesando una espaciosa avenida, escuchando la escueta habla del labriego o el tráfago inacorde de las plazas y calles populosas. Ha visto zaguanes de fresca sombra y arenas de sol donde giraba una capa bermeja y amarilla, ha mirado las estrellas bajo el páramo o las olas fracasadas del arrecife, fingió desentenderse de los hombres y ha penetrado en todas las clases, ideologías, miseria y pugnas de su tiempo. Ha porfiado contra la fe, la desidia y la falsedad, afincándose más y más en los años incontrovertibles, el esfuerzo renovado y la verdad sin juego. Ha leído hermosas y lamentables páginas, no ha perdonado ni olvidado porque apenas si recordaba, ha dejado que hablen la envidia sin causa y el odio sin pretexto, ha escrito unas pocas lineas ineludibles y ha arrojado el periódico a los perros. Un hombre ...